Antiguamente, allá por los finales años 70, y los años 80, la única manera que yo tenía de enterarme de nuevas músicas, nuevas bandas, o nuevos discos, era a través de mi tienda de discos referente, Oldies, o a través de mi buen amigo Jose, que sabía mucho mas de música que yo, o, incluso, a través de la radio, sobre todo los 40 principales, que era la emisora puntera de música que yo escuchaba, por aquellos años. Luego, ya bien entrados los 80, se añadió otra fuente de información sobre esa temática, y era mi local favorito, el pub Calcatta, del que ya he hablado en alguna ocasión en La Playlist del Yeyo, donde me enteraba de la aparición de las novedades musicales, sobre todo, en lo referente al indie. Pero llegaron los 90, me casé, cambié de domicilio, y las fuentes de información cambiaron. Primero fue el boletín informativo Discoplay, aquella revistita en la que venían todas las ofertas y novedades en cuanto a discos se refiere, y que recibía puntualmente, cada varios meses. Y ya avanzados los años 90, a partir de 1995, la fuente definitiva fue Internet. Me compré un pentium III, un ordenador (para los no entendidos), con Windows 95, y que llevaba incorporado un modem, con el que conectarse a la red. Eso fue para mi, un gran descubrimiento. Empezaba por aquellos años, el fenómeno que yo denomino MP3, y que cambió radicalmente la industria de la música, tal y como entonces se conocía. Al principio, parecía que eso era imposible, que no se le podía engañar a la industria así como así. Pero era verdad. Yo fui uno de esos que me descargué mi programa para compartir archivos, el Kazaa, y un poco incrédulo, lo reconozco, pero probé una descarga, y efectivamente, un archivo MP3 se descargó. Tardó un rato, pero se efectuó la descarga correctamente. Pude escuchar ese archivo con el reproductor de windows, y mi alegría no tenía límite. Tenía una canción en mi ordenador. Probé con otro archivo, y se repitió la historia. Poco a poco, iba descargando canciones, y me fuí construyendo una discografía, en la que llegué a tener, con el tiempo, varios miles de temas. Es a partir de ese momento cuando empieza a tener sentido para mi, la palabra playlist. Seguía valorando el concepto de album, como unidad musical, pero empezé a escuchar canciones sueltas, mezcladas con otras que nada tenían que ver entre ellas, solo les unía el criterio de mi gusto. Pero era suficiente. Empezé a grabarme CD's vírgenes, con esas canciones, aglutinadas por tipos de música, por cantantes o bandas, o incluso, por estilos. Aun no habían aparecido los reproductores MP3, y la única manera de recopilar toda esa música era a través del CD virgen. Y me hice una buena colección de CD's. Entre toda esa música que fuí coleccionando, quiero destacar aquí, una banda que descubrí por aquellos entonces. Era The Tremeloes, y me descargué algunas canciones de ellos, que me atrajeron y me hicieron gustar aun mas, si cabe, la música que se creaba en los años 60.
The Tremeloes, inicialmente llamado Brian Poole and The Tremeloes, surgió en el año 1958, y estaba conformada inicialmente, por Brian Poole, voz y guitarra, Alan Blakley, guitarra, Alan Howard, bajo, y Dave Munden, batería. Con el tiempo, su lider, Brian Poole, abandonó la banda, pero eso no menoscabó la calidad musical del grupo, sinó al contrario, a partir de aquí es cuando surgen los mejores temas de The Tremeloes. Aparecieron míticos éxitos de la banda, como por ejemplo Helule, Helule, que enganchan a cualquier amante de la música sesentera, pegadiza y agradable de escuchar. Aún recuerdo cuando escuchaba este archivo MP3 en mi viejo pentium III, en aquel arcaico Windows 95.
La magia de The Tremeloes, residía en su habilidad para fusionar pop y rock, con algunos toques de psicodelia, y folk. Ello les hizo captar la atención del público, con su estilo fresco y melodioso. Aunque nunca alcanzaron el nivel de otros gigantes como Beatles o Rolling Stones, si consiguieron mantener una presencia constante y relevante en el panorama musical británico, y no solo británico, también americano y europeo. Pero lo que les hizo distinguirse del resto de bandas británicas, que emergían por aquellos años, era su talento para las armonías vocales, un tanto complejas y muy agradables. El tema posiblemente mas destacable de esta banda, The Tremeloes, es Silence is Golden, y como podeis comprobar en este video, es una preciosidad de tema. Parece interpretada por una coral filarmónica. En mi opinión, tiene una belleza indiscutible.
Como ya he dicho antes, en el año 1966 se marchan del grupo, Brian Poole y Alan Howard, que son sustituidos por Rick Westwood y Len 'Chip' Hawkes, y con ello, salen ganando, pues los mejores temas de su historia musical, son compuestos a partir de este momento, es el caso de canciones como las que os he mostrado, pero también, Here Comes My baby que no solo supieron capturar el espíritu de la época, sino que también mostraron la capacidad de la banda para crear melodías pegajosas, rítmicas, y letras memorables.
Se da un caso extraño en este album recopilatorio, y es que se incluye una canción que no es de The Tremeloes, sino de Christie, y que les fue ofrecido a nuestros protagonistas, e incluso fue grabado y todo, pero al final no fue publicado. Consideraron que la linea de la canción difería de la linea que ellos querían seguir, por lo que se la devolvieron a Christie, que fue quien se llevó el éxito. La canción se titula Yellow River, y está incluida en este recopilatorio, Silence is Golden, como propia de The Tremeloes. Recuerdo perfectamente al descargar esta canción, que figuraba como de The Tremeloes. Supongo que también figurará como de Christie. En cualquier caso, el tema es muy agradable, y muy pegadizo y bailable.
No se sabe si fue por mérito de The Tremeloes, o por demérito de la compañia discográfica Decca, pero en 1962, esta discográfica escuchó a dos bandas jóvenes y prometedoras, de música beat, una era The Tremeloes, y la otra nada mas y nada menos que The Beatles. Pues bien, después de escuchar a ambas, Decca se decantó por The Tremeloes, y le ofreció un contrato para publicar sus canciones. A toro pasado, está claro que Decca se equivocó. Pero en aquel momento, es justo que se le diera el mérito a The Tremeloes, pues supieron ser mejores que los Beatles. Aunque solo fuera por una vez.
En mi humilde opinión, yo si quiero romper una lanza en favor de esta banda, no he querido seguir profundizando en la música de The Tremeloes, pero este album recopilatorio, si lo considero muy válido y representativo de lo que era la música de los años 60, y estoy plenamente convencido de que a trancas y barrancas, varios temas suyos, se colaron entre los huecos que dejaron bandas tan importantes de aquellos años, como los Beatles, los Rolling, The Who, The Kinks, The Doors, y otros, para completar entre todos una de las décadas mas prodigiosas y fascinantes de la historia de la música pop. La Playlist del Yeyo se enorgullece de incluir entre sus canciones algunos temas de The Tremeloes.


Podeis visitar la página de La Playlist del Yeyo, en la que están ubicados todos los videos colgados en el blog, a modo de playlist, incluidos los de The Tremeloes, para que los disfruteis todos juntos, y en el orden que querais. También teneis una emisora con La Radio del Yeyo, que contiene los hits de las décadas de finales del siglo XX. Y si buscas una canción o un video que no está en La Playlist del Yeyo, lo puedes localizar en el Buscador del Yeyo, procurando especificar bien el video o canción que quieres localizar.
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